CCOO del Hábitat | 29 marzo 2024.

CCOO de Construcción y Servicios presenta el balance de accidentabilidad laboral en el periodo 2018-2019

    Los accidentes con baja en construcción aumentan un 10% en 2019 respecto al año anterior, en un sector que representa el 6% de la afiliación al régimen de la Seguridad Social y sin embargo en número de muertes constituye el 21%

    10/03/2020.
    CCOO de Construcción y Servicios presenta el balance de accidentabilidad laboral en el periodo 2018-2019

    CCOO de Construcción y Servicios presenta el balance de accidentabilidad laboral en el periodo 2018-2019

    Por ello, CCOO de Construcción y Servicios sostiene que el incremento de la siniestralidad no es proporcional al aumento del empleo, tal y como reflejan los últimos datos del Ministerio de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social en su “Avance de Accidentabilidad 2018-2019”. En estas estadísticas oficiales destaca la situación del sector de la Construcción, donde las cifras hablan de un incremento de un 10% en los accidentes con baja entre asalariados, mientras que el número de trabajadores ha incrementado menos de un 1% en el mismo periodo.

    Igualmente, la crisis económica tiene que dejar de ser el parapeto bajo el que escudarse ante estos incrementos, porque en un recorrido de más de 20 años desde la entrada en vigor de la Ley de Prevención, no es posible que nos encontremos en un escenario donde se producen 695 muertes en un año. Estas cifras suponen que durante 2019 cada día natural murieron 1,9 personas en este país por accidente laboral.

    El sector de la construcción, además, es el que ha sufrido un mayor aumento de los accidentes mortales con un 4,2% frente al resto de sectores de actividad que han bajado, a excepción de Industria (1%). Así, del total de 695 accidentes mortales referenciados en 2019, pertenecían al sector construcción 145 trabajadores, de los cuales 117 fallecieron en jornada y otros 28 in itinere: casi el 17% de todos los accidentes mortales registrados en nuestro país. Siguiendo con los datos, la Construcción representa el 6% de la afiliación al régimen de Seguridad Social, y sin embargo en número de muertes por accidente representa el 21%; por contraste en Servicios, con un 78% de afiliación, representan solo el 48%.

    De hecho, en Servicios los accidentes mortales han descendido globalmente un 19,7%, que en números absolutos suponen un total de 284 muertes evitables; un dato que sigue siendo totalmente inaceptable.

    Un factor importante destacado en el informe es el tejido empresarial del Estado español, mayoritariamente conformado por micropymes y autónomos cuyos recursos son limitados. Como resultado de esto encontramos la falta de información y formación adecuada en prevención de las trabajadoras y trabajadores, falta de medidas de prevención y protección adecuadas, deficientes planificaciones preventivas o inexistencia de ellas.

    Para CCOO de Construcción y Servicios, la siniestralidad solo desnuda una realidad que es concluyente: el sistema productivo sigue otorgando un papel secundario a la prevención; se prima la productividad y esto produce un efecto arrastre que desemboca en la precariedad laboral, donde la seguridad y salud de las trabajadoras y trabajadores suele ser el primer recorte a aplicar.

    Desde esta Federación señalamos que es necesario cuestionarse de forma profunda y analítica cambios en la legislación laboral y preventiva. Solicitamos que se articule un Plan de erradicación de los accidentes laborales donde tanto administración (Ministerio de Trabajo, Inspección de Trabajo e Instituto Nacional de Seguridad y Salud en el Trabajo), como empresarios y sindicatos seamos capaces de elaborar y poner en práctica un cuerpo de medidas que den un giro a la actual situación. Necesitamos que desde la prevención de riegos se dé respuesta eficaz al mercado de trabajo en el que nos encontramos, donde unas pocas grandes empresas exigen medidas, y sobre todo, documentos preventivos a autónomos y pequeñas empresas que a la hora de la verdad ni cuentan con el asesoramiento, ni la formación, ni la cualificación ni los medios necesarios para hacer su trabajo sin poner en riesgo la salud de los trabajadores y trabajadoras.